Pechugas de pollo con salsa de curry

Cocinar es ponerse declara el año 2012 como su propio año bajo en grasas, por tanto en adelante, los platos que se publicarán no llevarán más grasa que la imprescindible.
Resulta que por una especie de broma genética tengo tendencia a generarme colesterol, y por tanto hasta que la próxima analítica dentro de unos tres meses no diga lo contrario, mi alimentación deberá regirse aún más por la ley antigrasas y además, eliminar de mi lista de habituales toda una serie de alimentos que tienden a elevar las tasas de colesterol (huevos, queso, embutidos, el cerdo en general, gambas...)

Dicho esto y superado el shock inicial, ya estoy a tope con mi danacol de fresa en ayunas cada mañana y por descontado me niego rotundamente de pasarme la vida comiendo cosas a la plancha o hervidas.
Por tanto, es momento ahora de replantear las recetas de toda la vida y otras tantas que puedan gustarme con la finalidad de eliminar, reducir y substituir aquellos ingredientes que no debo consumir.

En los próximos meses veremos si es posible o no esta tarea.

Después de este tostón post-traumático, los trucos. La cebolla se ha hecho con una cucharada de postre de aceite, si ves que se queda seco y se pega añade un chorrito de agua para pocharla. Las pechugas de pollo es importante que las hagas sin piel y limpiarles los recortes de grasa que suelen quedarles. El caldo de pollo se puede congelar en bolsas para hacer cubitos, es una manera muy práctica de tener tu propio avecream en el congelador lista para usar en cualquier momento.
 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Ingredientes:
2 pechugas de pollo sin piel y sin restos de grasa
2 cebollas
1 cucharadita de aceite
1 vaso de caldo de pollo casero
1 cucharadita de curry
sal y pimienta

 

 

Elaboración:

En una sartén caliente añadimos el aceite y las cebollas picadas, no es importante el tamaño, unos 2cm será suficiente. Salamos para ayudar a que la cebolla pierda agua antes y así no se dore. Cocinamos a fuego medio unos 10 minutos hasta que la cebolla esté bien hecha y en ese momento añadiremos el curry y el caldo.

Dejamos cocer el conjunto unos 10 minutos más.
Mientras tanto cortamos el pollo, lo limpiamos y salpimentamos.

Pasamos la cebolla y el caldo a la batidora y trituraremos hasta conseguir una salsa lisa. Si os habéis pasado con el caldo podréis espesarla con un poco de harina de maiz.

Hacemos las pechugas a la plancha en la misma sartén donde habíamos hecho la cebolla y servimos con la salsa caliente.
También puedes hacer taquitos de pollo, pasar por la sartén y meter de nuevo la salsa en la sartén para que termine de espera y de cocer la carne.

Nostros hemos hecho un poco de arroz para acompañar, como no tenía Basmati le he puesto ajo, laurel y canela al agua de cocción para aromatizar el arroz.


* Si tu no tienes problemas de colesterol, coge un yogurt griego, remueve bien y sírvelo junto a la salsa de curry para mojar el pollo.